Saludos comunidad:
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| Juana, la vendedora de nabos. |
De
pronto veo a una desconocida. Me acerqué para saber qué la había traído hasta
mi pueblo y se presentó con el nombre de “Juana” y resultó ser ni más ni menos
que una vendedora de nabos.
Me
intrigó mucho, así que decidí escuchar atentamente todo lo que tenía para
decirme, entonces me informó que las personas compraban nabos pero no para
comerlos necesariamente, sino que para negociar con ellos.
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| Todos los días pregunto a Paca por el precio de los nabos... ¡nunca se sabe! |
Aquella
semana compré algunos nabos para ver qué sucedía. Ella me los había vendido
cada uno a 115 bayas, y todos los días le preguntaba a Paca en Reciclaje
Bártulos que cuánto me ofrecía por los nabos, y siempre me daba precios
bajísimos, por lo que no los vendía. Por fin el día viernes me dijo que estaba
ofreciendo 130 bayas por nabo, y entonces decidí que era la oportunidad para
venderle mis nabos y sacar alguna modesta ganancia, pues ya Juana me había
advertido que si no los había vendido antes de que regresara el siguiente
domingo, los nabos estarían podridos.
Entonces
me dirigí a mi almacén donde había guardado mis nabos y me encontré con la
sorpresa que estaban podridos. Resulta que los nabos son muy sensibles a las
paradojas temporales, y ese día me conecté tarde y ya todo estaba cerrado, por
lo que decidí atrasar el reloj un par de horas para poder hacer lo que tenía
que hacer… ¡grave error! Como consecuencia perdí toda la inversión de los nabos
(que por suerte no había sido demasiado). Entonces por primera vez decidí que
nunca jamás por el resto de mi vida volvería a decirle a Canela “Una cosita…”
con el fin de modificar la fecha o la hora.
Entonces
llegó el siguiente domingo y ansioso salí a buscar a Juana. Me sorprendí al ver
que esta vez me vendía los nabos a un precio menor que la vez anterior, ahora
me vendía cada nabo a 94 bayas. Entonces descubrí que la fluctuación del precio
del nabo afectaba a todos y que influía tanto en el precio de compra como en el
de venta.
Feliz
por el precio decidí esta vez comprar unos cuantos nabos más, esta vez compré
1.000 nabos. Durante la semana constantemente preguntaba a Paca sobre el precio
de los nabos, pues fluctúa a diario, pero siempre eran precios bajos, entonces
decidí esperar. El sábado me dijo que estaba comprando los nabos a 98 bayas,
así que se los vendí y me reportó algunos beneficios, sobre todo por la
cantidad de nabos con los que había negociado.
Entusiasmado
con el negocio de los nabos, esperé el día domingo. Salí a caminar por la tarde
en busca de Juana y no la encontré. Entonces probé a llamarla con el megáfono
que había comprado en la tienda de Tendo & Nendo, pero tampoco contestó. La
busqué por todos lados, pero Juana se había ido. Ese día descubrí que Juana era
una madrugadora, y que si quería entrar al negocio de los nabos no podría
flojear hasta tan tarde los domingos.
Parecía
que Paca jugaba conmigo, pues esa semana que no pude comprar nabos tuvo precios
altos toda la semana.
Al fin
llegó el siguiente domingo, y tuve precaución de despertar temprano y buscar a
Juana. Me vendía a 107 bayas cada nabo, pero esta vez no le compré de
inmediato. Se me ocurrió consultar a mis amigos de mi lista de mejores amigos
que estaban conectados y que me dijeran a cuánto llevaba Juana los nabos en sus
respectivos pueblos. Entonces uno de ellos me informó que en su pueblo Juana
estaba vendiendo nabos a 83 bayas. Fui donde mi amigo y compré los nabos en su
pueblo. Entonces descubrí que el negocio de los nabos es mucho más provechoso
cuando compartes y cooperas con tus amigos.
Durante
toda esa semana estuve preguntando los precios de los nabos a Paca, pero esta
vez también cooperé con mis amigos y entre todos nos informábamos del precio de
los nabos en nuestros respectivos pueblos. Definitivamente tienes muchas más
posibilidades de obtener buenos ingresos si cooperas con tus amigos, pues el
precio fluctúa a diario y también es diferente de pueblo en pueblo cada día.
Esa semana vendí mis nabos en
un pueblo diferente al mío, donde un amigo, y vendí cada nabo sobre las 300
bayas. Estaba muy contento, pues esa semana el negocio de los nabos había sido
muy rentable.
Pensé
que mientras más nabos comprara por semana, más rentable sería, y si cooperaba
con mis amigos, los riesgos de perder en el negocio resultaba muy poco
probable.
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| Paca me ha pagado un montón de bayas por mis nabos esta semana. |
Me
preparé para la siguiente semana y estuve ahorrando bayas todos los días, para
poder comprar muuuchos nabos esa semana. Compré más de 6.000 nabos esa semana.
Aunque no encontrara un precio muy alto, de todas formas obtendría muchas
ganancias por el gran volumen que negociaba.
En la
semana pregunté a mis amigos sobre el precio de los nabos, y de pronto uno de
mis amigos me informa: “No lo vas a creer, Paca está ofreciendo los nabos sobre
las 450 bayas cada uno”. No hizo falta que me explicara más y partí a su
pueblo.
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| Me ha dado mucho dinero la venta de nabos... Aquí voy con 1.683.000 bayas en los bolsillos. |
Invertí
aproximadamente 600 bayas en nabos, y me reportó más de 5 millones de bayas la
venta de mis nabos.
Ten presente que Paca te dará dos precios de nabos al día, te dará un precio en la mañana antes del midiodía y uno distinto después del mediodía, así que tenlo presente.
Ten presente que Paca te dará dos precios de nabos al día, te dará un precio en la mañana antes del midiodía y uno distinto después del mediodía, así que tenlo presente.
El
negocio de los nabos es otra forma de obtener bayas en Animal Crossing: New
Leaf que puede ayudarte mucho a pagar todas tus deudas y los proyectos
municipales.
Pronto
seguiré hablando de las diversas formas de conseguir bayas en nuestro pueblo,
no te pierdas la próxima publicación.
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| El negocio de los nabos me proporciona millones por semana. |
Recuerda
también que puedes formar parte de nuestra comunidad de amigos en Facebook, es
tu opción para compartir con otros y aprovechar al máximo la jugabilidad de
este juego. Recuerda que para el negocio de los nabos es fundamental cooperar
con otros jugadores de diversos pueblos.
Por último, tener presente que Juana visita los pueblos cada domingo desde las 6 de la madrugada hasta el mediodía, luego ya no la encontrarás.
¡Hasta
la próxima!
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